Corsino vive en las afueras del conurbano bonaerense. Hace varios años heredó un café en el que trabajó desde los doce años. Aquel bar, más conocido como La Milonga, se encuentra en la ciudad de Buenos Aires resistiendose al paso del tiempo. Como buen símbolo del melodrama, Corsino cuenta y comenta las andanzas de personas que alguna vez se acercaron al café. Pero también escribe lo que se ha enterado y ha vivido en muchos de sus viajes. La razón de ¿porqué el dueño de un cafetín cuenta esas historias? no lo se. Una posible respuesta sea seguramente porque hoy forman parte de su vida.

lunes, 29 de julio de 2013

LADO B, Parte XXIV

ENTRENAMIENTO ROJO
Daniel, entrenaba y aprovechaba que su papá estaba en el tema aunque a finales de los noventa se había retirado para trabajar enteramente en el taller textil. Comenzó a ir a otro gimnasio...uno cercano al Cine Paz donde casi nadie lo conocía. El padre le armaba las rutinas y, aunque seguía yendo donde practicaba TKD (cerca de su casa) intercaló algunos meses en otras escuelas para ver los diferentes estilos. Trotaba en Muñiz todos lo fines de semana...
En medio del entrenamiento, al correr o practicar... a veces aparecían esos ojos, tropezaba y volvía a concentrarse en exámenes, libros, flexiones...en un parpadeo engullido fino al estomago....solo le preocupaba el próximo torneo. 
En cuanto a las clases de TKD cerca de su casa, cada vez que terminaban las practicas, su instructor daba cátedra y les comentaba como iba su participación política en la municipalidad. Todo el gimnasio se estaba agrupando con un partido político opositor al de turno, uno que venía ocupando la intendencia poco más de una década...aunque este nuevo partido trabajaba para el de turno...no era muy claro.
No le daba importancia. Por consejo del entrenador del gimnasio, donde hacía complemento, cambiaron su alimentación para aumentar de peso y así poder trabajar mejor.


Participó en dos torneos en Capital junto a su escuela, salió tercero en lucha y recibió varios golpes en el rostro que parecían haberle revuelto las entrañas del odio que estaba gestando contra sus adversarios sin rostro.
Era fin de mayo, llegó su cumpleaños y Cristian, Alberto y Pablo fueron a su casa aunque no al mismo tiempo. Era de noche y mientras miraban una película Cristian recibió un llamado a su celular. Era Laura su novia que vivía en Córdoba, lo llamaba para ver donde estaba. No se escuchaba mucho. La familia de Daniel se había ido a dormir, era de madrugada, y Cristian salió a hablar a fuera. Parecía estar discutiendo y esa situación comenzó a repetirse con el tiempo. El cumpleañero tuvo que salir a fuera y pedirle que bajara la voz, que sus viejos estaban durmiendo. Increíblemente después del llamado se fue a su casa como si lo hubieran retado por algo. Alberto miró para otro lado y Pablo no entendía nada. Sin embargo Daniel vio en esa pelea un filo de nostalgia y la cara de Agustina se le presentó. Sin saber cómo recreó una extraña sensación esta vez con gusto por querer estar con ella aunque sea peleando...aunque sea, así no necesitaba imaginarse su voz. Sentía un mal revuelto y sin saber que hacer....reprimió rápidamente aquel sentimiento patético...hasta que el sueño llegó y cada uno se fue a su casa. 

El 27 de mayo un grupo de artistas e intelectuales firma una solicitada en contra de las medidas que tomaba el campo con el gobierno, esa solicitada se llamó "Una amenaza del pasado que agrede nuestro futuro", y entre algunos nombres firmantes resaltaban los de Mercedes sosa, el filosofo J.P. Feinmann, Leonardo Favio.... Todo en respuesta a las medias de paro que tomaban las cuatro facciones rurales.

Eran los primeros días de junio, en los supermercados se despertó la paranoia. Algunas personas tenían problemas al tratar de conseguir algunos productos como ser un saché de leche, debido a que solo permitían comprar un cartón por grupo familiar. En otras góndolas no habían abastecido debido al paro agropecuario. En el centro se armaron campamentos frente al Congreso de la Nación.


DEL PASO POR NUEVA YORK II

Casi cuatro meses antes, en E.E.U.U., Nueva York, febrero del 2008.

El diario de Agustina II

Decidí quedarme dos meses más. Las chicas del departamento no tuvieron ningún problema, aunque el hermano de una de ellas iba a visitarnos diez días y me aclararon que íbamos a estar un poco incomodas. Mientras tanto vigilaba la página de la facultad porque me tenía que inscribir por Internet a las materias del cuatrimestre y no me quería perder la primera fecha. Y no lo hice por que me pude inscribir sin ningún problema.
Llegó febrero y también llegó Philip. Era el hermano de Sarah, tenía 27 años y vivía en Michigan aunque no recuerdo donde exactamente. Era arquitecto y estaba en unas pequeñas vacaciones.
Al principio no hablábamos mucho, hasta que el tercer día me invitó a almorzar a un restaurante del centro ya que era la única que no tenía nada que hacer a las dos de la tarde. Hablamos un largo rato y en aquel momento me enteré que hablaba español pero que no quería decir nada hasta oírme hablar a mí. Pero como fuera del curso de español no hablaba más que inglés y francés en el caso de Anaii, no tuvo oportunidad de hacerse notar.
Supongo que no debería haber ido a almorzar con él, pero fui y decir ahora que me arrepiento sería mentir como una caradura.

Fue buscarme en auto hasta el instituto de idiomas y de ahí fuimos al restaurante. Supongo que fue a partir de aquel día que me mareé. Él me hablaba de Europa y Asia, de cuando era estudiante. Yo le hablaba de los pocos lugares que conocía, coincidíamos en París, Dublín y Londres. Aunque también era mucho más chica que él cuando visité esos lugares.
[...]



Continuará...




No hay comentarios:

Publicar un comentario